PARA SALIR DEL SIGLO XX :
DEL PARADIGMA DEL REPORTERO ASALARIADO
AL PARADIGMA DEL PERIODISTA PROFESIONAL

Luis H. Toledo Vilca
Jefe Carrera de Periodismo
Universidad José Santos Ossa

El siglo veintiuno se gesta a partir de la desestructuración del Orden Mundial que encuadró el accionar de los actores políticos y económicos gravitantes en la dinámica social de la segunda mitad del siglo veinte: el término del modelo fordista de desarrollo capitalista mundial y del sistema bipolar como eje ordenador geo-estratégico del planeta (ver E.Hobsbawm, Historia del Siglo XX, J.Habermas.Este corto siglo XX).
Esta ponencia parte de esa constatación para proponer preguntas claves que emergen del nuevo contexto nacional-internacional con respecto al tipo de periodista que la Universidad debe formar para responder a las exigencias e imperativos de la Sociedad de la Información en el cuadro económico-político del capitalismo global.

Tendencias de fondo y larga duración

Este esbozo tiene por finalidad aportar una visión centrada en las líneas de fuerza que determinan las preguntas claves pertinentes a la formación del periodista universitario que ejercerá su profesión en los primeros decenios del siglo actual.
Para ello, nos apoyamos en las tendencias de fondo y de larga duración (F.Braudel) que determinan el tiempo histórico del primer cuarto de siglo. Estas permiten direccionar la mirada prospectiva y encuadran (limitan e imponen) el accionar futuro del periodismo como actividad profesional y manera específica de "ganarse la vida" (de vivir nuestra única eternidad).

I. La globalización y el reforzamiento de la sociedad de la información y la desaparición de la sociedad industrial (M. Castells.- La Era de la Información, 3 vols. México; Madrid, FCE, 1999)

El periodismo nace como especialización funcional al sistema socio-productivo conocido como capitalismo industrial, en un contexto social calificado de Sociedad Industrial. Ello marcó el tipo de tecnologías y habilidades propias al desempeño profesional: uso de un lenguaje altamente operativo y lineal (la pirámide invertida) y manejo de la escritura y la máquina de escribir. Su personaje: el reportero del capitalismo mecánico.

En sus inicios, el reportero investiga, comprende e informa sobre la cotidianidad de una sociedad marcada por el tiempo de la sociedad centrada en lo metal-mecánico: la gran industria asalariada, el modelo fordista.
El modelo fordista se agota y tras la crisis del 73/74 se inicia la implementación del post-fordismo, del capitalismo financiarizado, marcado por el tiempo on-line, virtualizado y de crisis recurrentes: el tiempo de lo precario, en lo social; del exceso de datos y déficit de información (dato + sentido), de la pérdida de referencia del principio identitario socio-afectivo y socio-profesional : el principio de la nacionalidad-estatal (sobre el tema ver los escritos póstumos de N. Poulantzas (Estado y socialismo), K. Omhae, J.O'connor, etc.,).
El oficio de periodista se tiene que ejercer en un nuevo entorno: investigar, comprender e informar en una nueva sociedad, la Sociedad de la Información; y en una nueva fase sistémica, la del capitalismo global o globalización capitalista:
Su paradigma, el periodista del capitalismo informacional. (Sobre Global Capitalism, ver a autores como S. Amin entre otros. Una visión interesante desde el periodismo, H.P. Martin y H. Schumann. La trampa de la Globalización. El ataque contra la democracia y el bienestar. México; Taurus, 1999).

Por lo tanto :

¿Qué tipo de competencias psico-cognitivas tenemos que desarrollar para comprender los datos generados por, en y para la sociedad de la Información?

¿Cuáles habilidades y técnicas para investigar en el nuevo contexto global ? y

¿Cuáles maestrías de manejo de tecnologías lingüísticas, audiovisuales e informacionales son necesarias para informar en el siglo XXI?

En consecuencia, tres son los factores determinantes para definir el perfil profesional del periodista de los primeros decenios del siglo XXI :

• · Lo psico-cognitivo
• · Lo técnico-metodológico investigativo
• · Lo tecnológico lingüístico-audiovisual-informacional.

II. Imposición creciente del Neoliberal State y la precarización y rarefacción del
empleo asalariado

El reportero a lo largo del siglo XIX y hasta los 70 del siglo pasado, se hace y construye en la lucha por el empleo asalariado. La crisis de los setenta desestructura esos procesos. Aparece, de manera masiva, el periodista free-lancer o "pigiste", es decir, sin un capitalista que lo contrate a tiempo completo.
Hoy esta precarización y sub-ocupación o desempleo se ha generalizado en la sociedad chilena y mundial: el modelo 20/80 se discute y visualiza hacia el segundo-tercer decenio del siglo actual: 2 bien "insiders" (dentro del aparato productivo, buen salario, cobertura médica y jubilación) y 8 "out-siders" (desempleado o empleo precario, interrumpido, bajo salario, sin cobertura médica ni previsional). (ver Rich y su fin del trabajo asalariado, los informes de la OIT y Martin y Schuman ya citados).

Frente a ello, preparar periodistas ¿para qué?

• · ¿Reportero-asalariado? Paradigma del siglo XX, o
• · ¿Periodista profesional autogestionario? Paradigma del siglo XXI.

Por ende,

• · ¿Qué rasgos de personalidad desarrollar?
• · ¿Qué capacidades psico-cognitivas reforzar? y
• · ¿Qué tipo de técnicas de auto-gestión de vida enseñar e internalizar?

III. Un mundo necesitado de ética y solidaridad social

La crisis de Welfare State, el paso al post-fordismo y al capitalismo global es, en parte, resultado y causa de la desestructuración de los lazos de identidad y de solidaridad humanos en un cuadro que supere los tribalismos y los grupos de pertenencia primarios.
La gobernabilidad de la especie y de las sociedades nacionales hacen necesaria la reconstrucción de los valores éticos y de solidaridad en un cuadro global-nacional, superando los chauvinismos, los racismos y las discriminaciones clasistas y sexistas del siglo XX y generando las bases de una democracia real, es decir, con una amplia participación de las comunidades en la toma de decisiones que conciernen a lo público (sea global, nacional o local).
Esto también exige una formación en términos de valores y un aprendizaje de conductas concordantes con éstos.

Por ello, es válido preguntarse :

• · ¿ Qué patrones conductuales serán fomentados ? y
• · ¿ Cuáles serán los sistemas valóricos propiciados ?

Estas tres líneas de fuerza, que estructuran los tiempos de la alborada del nuevo siglo, nos sirven como puntos de referencia en este ejercicio de definir un perfil profesional prospectivo, es decir, del periodista del mañana que cada día es más nuestro hoy.

Para los fines operativos y las urgencias que son las nuestras en este momento, pienso que este esbozo inicial nos permite construir una matriz conformada, en lo horizontal, por tres módulos : la sociedad de la información, la sociedad del auto-empleo y , a título de desafío y compromiso establecido en nuestra misión universitaria, la sociedad solidaria. Y en lo vertical, por las habilidades o capacidades, técnicas, tecnologías, personalidad y valores necesarios para que el periodista diplomado de la Universidad José Santos Ossa pueda vivir su humanidad con principios humanistas y ejerciendo un oficio hermoso, difícil y desafiante con competencia.

Anexo de términos claves

• Competenci Aptitud, idoneidad (RAE, t.I,p.523)
• Competente Buen conocedor de una técnica, de una disciplina, de un arte.
  (Ibid.)
• Capacidad Aptitud, talento, cualidad que dispone a alguien para el buen ejercicio
  de algo. (RAE, t.I, p.396)
• Capaz Fig.. Apto, con talento o cualidades para una cosa determinada.
  (Op.cit., p.397)
• Aptitud Suficiencia o idoneidad para obtener y ejercer un empleo o cargo.
  Capacidad y disposición para el buen desempeño o ejercicio de un
  negocio, industria, arte, etc. (RAE, t.I, p.175)
• Apto Idóneo, hábil, a propósito para hacer alguna cosa. (Ibid.)
• Habilidad Capacidad y disposición para una cosa, gracia y destreza en ejecutar
  una cosa. (RAE, t.II, p.1080)
• Hábil Capaz y dispuesto para cualquier ejercicio, oficio o ministerio.
  (Ibid.)
  
  

1. Profesional en el sentido del abogado o médico: que se instala por su cuenta y vende su saber hacer al mercado.
2. Fuente: Real Academia Española (RAE). Diccionario de la lengua española, XXI ed. Madrid: Espasa Calpe, 2000.