Chile es blanco
de dumping por la UE
Salmón
que se duerme, se lo lleva
Irlanda
y Escocia acusan de dumping a salmoneros chilenos.
El
gobierno y los empresarios viajarán a Europa para evitar
la imposición de cinco años de alza arancelaria.
Por
David Azócar y Carlos Castillo
El
24 de junio la Asociación de Productores de Salmón
y Trucha, encabezada por su gerente general Rodrigo Infante, decidió
viajar a Europa para detener las acusaciones de dumping interpuestas
por productores escoceses e irlandeses. Sin embargo, la Comisión
Antidumping de la Unión Europea dio curso a la acusación.
Ésta
no es la primera vez que a Chile se le acusa de cometer prácticas
de competencia desleal. En otras oportunidades, productores de países
como Estados Unidos, Brasil, Perú y Venezuela se han quejado
contra exportadores criollos.
Escoceses e
Irlandeses pertenecen a la Unión Europea, que paradójicamente,
es el nuevo socio comercial de Chile, en virtud del reciente tratado
de libre comercio acordado en mayo de este año.
Acusaciones
que se arrastran
La palabra,
de origen inglés, se aplica en el sentido de" despilfarro"
en la jerga monetaria y corresponde a una práctica muy frecuente
de que un país ingrese al mercado interno de otro. Pero es
en el ámbito económico donde adquiere un uso más
relevante. Realizar dumping alude al hecho de que un gobierno
subsidia productos de exportación para que éstos se
vendan en otros países a un precio bajo los costos de producción.
De esta forma, se busca monopolizar el mercado.
La historia
de acusaciones por dumping contra exportadores chilenos es
bastante antigua y los salmoneros han sido protagonistas en más
de una ocasión. Por primera vez en 1997 fueron acusados por
Estados Unidos en razón de la venta bajo el costo de producción
del producto marino, en desmedro de los productores norteamericanos.
A principios
de 1999, la empresa Bodegas Pomar de Venezuela acusó a 20
viñas chilenas de cometer dumping y al Estado chileno
de subsidiarlas para que compitieran deslealmente en el mercado
de ese país. Chile se defendió ante la Comisión
Antidumping y sobre Subsidios de la empresa venezolana, la cual
finalmente decidió no acoger las acusaciones.
La filial de
Talca de la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones
(CMPC) fue acusada, en febrero de 2000, de enviar a Brasil cartulinas
subsidiadas por un valor de 15 millones de dólares. El gerente
general, Washington Williamson, explicó que el motivo de
la acusación de los brasileños obedecía a la
buena calidad de la cartulina chilena, que la hace bastante competitiva
en cuanto a precios.
Desde Perú
también han venido acusaciones contra exportaciones chilenas.
En este sentido, fue el aluminio el producto perjudicado por las
medidas adoptadas por la Comisión de Dumping y Subsidios
del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual (Indecopi), que decidió imponer
una sobretasa de un 16,3 por ciento a las importaciones de aluminio.
Estados
Unidos: principal acusador
Por lo menos
en tres ocasiones, productos chilenos han sido acusados ante la
International Trade Comisión (ITC), organismo económico
encargado de fiscalizar la competencia leal entre productores estadounidenses
y extranjeros. En 1997 fue el salmón y este año la
ITC emitió dos fallos respecto a productos chilenos; uno
a favor y otro en contra. Resulta paradójico que, al tiempo
que se dan estos litigios, se intente establecer el tan anhelado
Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
A mediados del
año 2000, los productores del valle de Coechella, California,
acusaron a fruticultores chilenos de la sexta región de cometer
dumping: esta vez, el producto en cuestión fue la
uva de mesa exportada a los Estados Unidos. La ITC, en su fallo
emitido el 11 de junio del 2001, decidió por cinco votos
contra uno no acoger la acusación debido a que consideró
que no existía daño efectivo contra los productores
estadounidenses. Todo un triunfo, puesto que el mercado norteamericano
es el más importante para los productores de la zona.
Lobby
en favor de salmones.
Diversos parlamentarios
de gobierno han comenzado un lobby en favor del negocio chileno
de la salmonicultura. "La información que tenemos es
que nos quieren sacar del mercado antes de que tengamos vigente
el acuerdo con la Unión Europea", denunció el
senador oficialista, Gabriel Valdés, haciendo referencia
a que la sola firma del tratado con la UE, no es garantía
de excención de dumping.
Algunos parlamentarios
temen que las continuas acusaciones de competencia desleal contra
productos chilenos perjudiquen económicamente las exportaciones
nacionales. "La intención chilena es vender mucho más
en el mercado europeo y con esto (la acusación) estamos expuestos
a que en poco tiempo más se nos coloque un arancel muy alto
como castigo lo que, en definitiva, nos saque del mercado",
dijo el senador Adolfo Zaldívar, de la Democracia Cristiana,
al igual que Valdés.
El propio presidente
Ricardo Lagos se refirió al tema del dumping. Opinando
que la solución a este tipo de problemas es entablar asociaciones
estratégicas que eviten la proliferación de futuras
acusaciones: "enfrentar el tema del 'dumping' requiere
que seamos capaces de enfrentar alianzas", dijo.
De
nuevo el salmón
El producto
con mayores acusaciones de dumping es el salmón. Primero
en 1997 por parte de Estados Unidos y hoy por la UE.
Los principales
argumentos entregados por los productores chilenos a la Comisión
Antidumping de la UE, fueron que 90% del salmón que se consume
en Europa es fresco, mientras Chile exporta salmón congelado,
por lo que las exportaciones chilenas no perjudicarían a
las empresas europeas , pues el salmón congelado que se vende
en Europa es 100% importado de otros lugares. Del total de consumo
de salmón en Europa, Chile sólo representa el 4,9%,
por lo que no afecta a los precios de la competencia.
La Comisión
Antidumping decidió el 18 de julio acoger la investigación,
que podría durar hasta 15 meses. De comprobarse, las sanciones
serían durísimas para los exportadores nacionales,
podrían consistir en extender una sobretasa arancelaria a
todas las empresas chilenas exportadoras de salmón o establecer
cuotas a los envíos chilenos.
El problema
de fondo va más allá de las acusaciones de los productores.
De lo que se trata, según dice el Presidente Lagos "es
de una pugna entre un país que se abre a los mercados internacionales
de la mejor manera posible y que es trabado por reglas que favorecen
a los mercados tradicionales".
Tanto Estados
Unidos como la UE son mercados entrelazados con Chile por el libre
comercio. La Unión Europea ya negoció los términos
del tratado, pero aún falta que el mercado ponga en marcha
sus reglas. Mientras tanto, las barreras paraarancelarias siguen
afectando a la economía nacional.
Chile está
a pasos de otro tratado con Estados Unidos, pero debe ser prudente
ante los, porque si ya hubo roces con estos colosos de la economía
mundial, el panorama que los roces con los colosos de la economía
mundial. El panorama que les espera a los exportadores debe ser
tomado con extrema cautela, pero con convicción de que los
productos chilenos son competitivos, como explicó el ministro
de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre.
Ya lo dijo el
senador Valdés: "esta acusación en contra de
salmones chilenos es un test de cómo nos tratará la
Unión Europea... si no nos ponemos firmes en esto, tampoco
podremos hacerlo en el futuro". Mientras el abogado defensor
de Chile en la acusación de dumping de Venezuela,
Antonio Ortúzar señaló a La Segunda que "debemos
contar con gente especializada que no sólo sepa reaccionar,
sino ser preactiva para defendernos mejor. Habría que pensar
cómo coordinar al sector público con el privado".
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