Francisco Gedda, director de la nueva carrera de Cine y Televisión
"Debemos asumir un rol conductor en el espacio audiovisual"
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| El prof. Francisco Gedda es el director de la nueva carrera de Cine y Televisión |
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Agitados son los días del cineasta Francisco Gedda después de aprobarse la carrera de Cine y Televisión. Como la dinámica guión - filmación, lo que está listo en el papel tiene ahora que tomar una forma concreta. Y tal como en el rodaje de una película, hay poco tiempo y mucho que hacer. El director del área de cine del ICEI está con la energía necesaria para posicionar a la Universidad de Chile en lo alto de la enseñanza cinematográfica del país. Y no por el camino de Hollywood, por cierto.
El 27 de septiembre pasado el Consejo Universitario de la Universidad de Chile aprobó la carrera de Cine y Televisión, que se impartirá desde el próximo año en el Instituto de la Comunicación e Imagen. En un momento de intenso crecimiento en la fabricación audiovisual de nuestro país, la nueva carrera busca crear un espacio de discusión y producción en relación a los problemas de la identidad y la memoria visual.
El profesor Francisco Gedda, quien está a cargo del área de Cine del ICEI, cuenta las razones del estreno y lo nuevo que ofrece en relación a los demás centros de enseñanza cinematográfica del país.
Vocación de excelencia
- ¿Por qué abrir la carrera de Cine y Televisión en la Universidad de Chile?
- En primer lugar, una universidad pública y nacional como es la Chile tiene que asumir, con su visión plural y laica, un rol conductor en el espacio audiovisual, que hoy día es el principal constructor de imaginarios sociales. La segunda razón es el ser coherente con la visión que tuvo la Universidad en el año ´57, cuando comprometió su apoyo al Centro de Cine Experimental, fundado por Pedro Chaskel y Sergio Bravo. De alguna manera lleva 50 años vinculada a la fundación del cine en Chile, y al primer movimiento serio e importante que originó todo lo que hoy en día existe, una especie de continuo de cultura y quehacer cinematográfico. Esto se perdió en el año '73 por razones completamente ajenas a la voluntad de la Universidad... es un acto de justicia devolverle su rol fundacional, académico, de investigación y de reflexión sobre el campo cinematográfico.
Además, nuestra Universidad tiene una vocación de excelencia que trasciende todos los cálculos económicos y financieros con los cuales hoy en día se crean carreras y existen universidades.
- ¿Cómo lograr la excelencia?
- Teniendo una orientación estratégica en la búsqueda de ese objetivo y con el apoyo de los cineastas y docentes en cine, de los cuales prácticamente todos los que hemos contactado quieren enseñar en la Universidad de Chile.
Podemos tener la mejor tecnología del mundo, pero si no tenemos a los cineastas que han marcado el camino identitario nacional y que han explorado distintos caminos de construcción de lenguaje audiovisual, revisando, interpretando y criticando el mundo social chileno, no vamos a tener una buena docencia. Y estos cineastas ya están comprometidos con la carrera.
- ¿A quiénes se refiere específicamente?
- Por nombrar algunos, ya están comprometidos Orlando Lubbert y Cristián Galaz en ficción, y Pedro Chaskel, Ignacio Agüero y Paola Castillo en documental.
¿Arte v/s Comunicación?
- En otras universidades, tanto nacionales como extranjeras, la carrera de Cine se imparte dentro de las facultades de Arte. ¿Cuál es la diferencia de ofrecerla dentro de un Instituto de Comunicación?
- Si le preguntas a Pedro Chaskel y a muchos de los cineastas de los '60 y '70 por qué empezaron a hacer cine, te responden de inmediato que lo hicieron porque querían cambiar el mundo. Todo el movimiento fundacional del cine latinoamericano de ésa época se enlaza intensamente con la comunicación social, con las ciencias sociales, con la construcción de imaginarios sociales. Entonces es absolutamente pertinente su iniciación en el Instituto de la Comunicación e Imagen, cuyo norte es la comunicación social.
- ¿Pero habrá algún vínculo con la Facultad de Arte de la Universidad?
- Estamos trabajando desde hace un año y medio con la Facultad de Arte. En términos concretos, hay una integración de académicos, transversalidad en algunos contenidos, búsqueda de tránsito de estudiantes entre esa facultad y el ICEI y la reconstrucción en conjunto de la Cinemateca de la Universidad de Chile. Lo que planteamos es que hoy día la frontera entre el arte y la comunicación se tiende a borrar. Tenemos que hacer un esfuerzo importante para hacerla transversal. Que el cine no se meta en el casillero de si es arte o si es comunicación. Ambas pueden, transversalmente, estudiar e interpretar el cine.
- En términos académicos, ¿qué diferencias tiene esta carrera de cine con la que ofrecen otras universidades o escuelas?
- Una diferencia de enfoque sustancial es la formación básica común con Periodismo. Desde el punto de vista de la formación especializada, nos planteamos etapas metodológicas. En el primer año se hará la iniciación al campo audiovisual, un taller inicial de enfrentamiento y aprendizaje con este lenguaje y con sus competencias básicas. El segundo año está absolutamente centrado en el documental, de manera que se aprendan técnicas de investigación y que se traten los contenidos de la realidad, precediendo así a la ficción. Cuando aparece en tercer año, la ficción está "contaminada" por el lenguaje documental y la inmersión en sus contenidos. Ese sesgo es el centro y la diferencia de nuestra carrera con las demás que existen en Chile. Y esto es muy importante, puesto que el nuevo cine emergente de países como Irán, China y Corea, está intensamente entrelazado con la mirada de documental de los realizadores de ficción. Muchos de sus lenguajes y búsquedas temáticas se toman del documental, enriqueciendo gracias a esto la precariedad productiva. Desde ese punto de vista nos estamos insertando en este cine emergente que existe en el mundo, y nos estamos divorciando del camino de Hollywood.
| Texto: Eduardo Chávez |
Fecha
de publicación:
Miércoles 12 de octubre, 2005 |
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