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Tarjetas de crédito:

Dinero…vil plástico

"Dinero, dinero, dinero, dinero vil metal", ha cantado por muchos años el afamado catalán Joan Manuel Serrat. Pero algo de su letra ya no suena tan obvio. Especialmente ahora cuando el llamado "dinero plástico" es para muchos la única alternativa.

por Paulina Sepúlveda

Las ventas del año 2000 en Chile con tarjetas de crédito alcanzaron los 4.000 millones de dólares, y cada año representan más del 25% del total de las ventas anuales. En tiempos de crisis, cuando por todos los medios se fomenta el aumento del consumo, este medio de compra es el más recurrido.

Pero a las tradicionales tarjetas de crédito les salió competencia. Y es que las grandes tiendas de ventas por departamento están decididas a que sus tarjetas de consumo se puedan utilizar en todas partes. El uso de ellas no se restringe sólo a las multitiendas, fuera de ellas, es posible ocuparlas en farmacias, para cargar teléfonos celulares, comprar entradas para recitales, pagar la patente del auto, entre muchos otros usos. Pero eso no es todo. Actualmente el rubro financiero ofrece también otras tentadoras alternativas.

El gran negocio de las multitiendas

Miles de chilenos tienen tarjetas de crédito en su billetera. De ellos, la mayoría posee más de una tarjeta de multitienda. Entre las tres principales casas comerciales del país -Falabella, Almacenes París y Ripley- suman una cartera de clientes que supera los 7 millones de tarjetas emitidas. Más del 70% de las ventas en estos negocios se realiza a través de este medio.

Gracias a ellas muchas personas pueden adquirir ropa, electrodomésticos, música, muebles, todo lo que estos locales tentadoramente ofrecen. Hoy, además de esos productos, es posible adquirir seguros y créditos bancarios, y todo con la misma tarjeta.

Hace tiempo que el comercio tradicional dejó de ser el principal eje de las grandes tiendas por departamento del país. Hoy las tiendas con mayor presencia en el ámbito nacional aspiran a más. El negocio bancario para estas compañías representa mucho más que un nuevo giro, se transforma en un complemento a sus servicios tradicionales.

Aprovechando la clientela fiel, creciente y con capacidad de pago a largo plazo, las casas comerciales ven con buenos ojos el negocio. Al observar que el negocio de las multitiendas ha evolucionado positivamente, lo que se refleja en el importante número de usuarios de tarjetas de crédito, las empresas de este rubro se atrevieron a dar el gran paso.

Primero partió en Banco Falabella, y luego fue el turno de Ripley. Para facilitar a los clientes el acceso a ellos, ambas sucursales bancarias se encuentran dentro de las mismas tiendas. La forma de actuar de este tipo de bancos es similar al de una financiera. Se basa fundamentalmente en créditos de consumo de corto plazo y prestamos hipotecarios, por sobre las cuentas corrientes.

El objetivo es el negocio bancario, dirigido principalmente a clientes que no tienen acceso a los tradicionales canales financieros. Pretenden bancarizar a los segmentos medios -C1, C2 y C3- que por sus bajos ingresos no pueden optar a otras instancias de crédito. Las ventajas son las tasas de interés menores a las que obtendrían en otra entidad.

Banco Falabella tuvo ganancias por 1.395 millones de pesos, en el 2001. Sin embargo en el mercado sostienen que el nivel de penetración de estas entidades económicas es todavía bajo. El gerente general de Falabella, Pablo Turner, ha manifestado que la llegada de las otras tiendas al rubro impulsará a estos bancos a posicionarse en nichos de mercado donde la demanda no está cubierta.

Para la numerosa clase media del país, que en periodos de "vacas flacas" aumenta en integrantes, estas nuevas alternativas de créditos son muy beneficiosas. Sin el requisito de altos ingresos y con bajas tasas de interés, son la oportunidad para muchos de participar en el tan deseado aumento del consumo.

Tarjetas multiusos

Las tarjetas de crédito sorprenden con su amplia posibilidades de usos. Hoy además es posible ser solidario con ellas. Incluso existe una página en Internet, que en la dirección www.Darcontarjetas.cl, permite a quienes cuenten con las tarjetas tradicionales, ayudar. Las posibilidades que se ofrecen son extensas, incluyen instituciones de ancianos, niños, mujeres, organizaciones culturales y que combaten la drogadicción, entre muchas otras.