Juan Luis Cebrián en Casa Central:
"La información no es poder en sí"

Invitado por nuestra escuela, el periodista fundador del diario "El País" dio una clase magistral sobre la historia del periodismo, el futuro de Internet y la libertad para informar. En la ceremonia, el rector Luis Riveros le hizo entrega de la medalla rectoral de la Universidad de Chile y anunció la reposición del Premio Periodista José Carrasco Tapia, galardón que Cebrián obtuviera en 1990.

Con diversas anécdotas sobre el origen de la prensa en el mundo, el destacado periodista español Juan Luis Cebrián dictó la clase magistral "Pasado y futuro del periodismo", el lunes 5 de noviembre, en el salón de honor de la Casa Central de la Universidad de Chile.

A la conferencia, organizada por nuestra escuela y que contó con el apoyo del Ministerio Secretaría General de Gobierno y de radio Cooperativa, asistieron las máximas autoridades universitarias, numerosos estudiantes de periodismo, académicos y profesionales de los medios de comunicación; atraídos por la vasta experiencia y trayectoria del orador, quien es uno de los fundadores del diario "El País" y miembro de la Real Academia Española de la Lengua.

Su exposición se inició recordando los orígenes del periodismo, que se sitúan en la antigua Grecia, y los primeros periódicos, surgidos en el siglo XVII, los que no tenían más de tres páginas y estaban conformados básicamente por comentarios y críticas de actualidad. Benjamín Harris, se convirtió en el pionero de aquellos boletines, emitiéndolos en la ciudad de Moscú, con el tono activo y agresivo, que más tarde se observaría en la prensa americana.

Para Cebrián, en esa época y durante mucho tiempo (hasta el nacimiento del denominado "nuevo periodismo"), la profesión se vio marcada por un fin comercial y masivo, donde la veracidad quedaba supeditada a la necesidad de ser de bajo costo para alcanzar mayores ventas.

Arma poderosa

En ese contexto, a juicio del periodista, durante toda su existencia la prensa ha ido de la mano con el desarrollo del hombre, convirtiéndose en un indicador de la situación que éste vivía, por lo que la necesidad de especialización se hizo evidente. Debido a ello, en tiempos de guerra y agitación político-social la información se convirtió en un arma poderosa, capaz de influir en la opinión de la gente.

En referencia a esta situación, según indicó Cebrián en su relato, diversos filósofos existencialistas se quejaron del poder de la prensa sobre la conciencia de las personas. Es en aquella percepción desde donde nace una de las características del periodismo que se ha mantenido inmutable en el tiempo: su fuerte relación con el poder.

En tal sentido, el académico cita a Felipe González, ex presidente del Gobierno español, cuando explica que la información no es poder en sí, pero pueden ser utilizados por las esferas de poder para conseguir sus objetivos. Situación que se da principalmente por la dependencia comercial de los medios hacia sus patrocinadores.

A juicio del profesional, en la antigüedad fueron los escritores los que se vieron en la necesidad de vender su trabajo para subsistir, lo que se mantiene hasta hoy, como una actividad a gran escala. Quienes tienen poder necesitan de la prensa -indicó- para contar con el apoyo de opinión pública, siendo la Guerra del Golfo (1990) ejemplo claro de ello. Según Cebrián, en esa ocasión, la cadena de noticias CNN mostró su capacidad a escala global, a la vez de actuar a instancias de lo que el gobierno de EE.UU. necesitase.

Y sobre la cobertura periodística de guerra que se libra en Afganistán, el expositor señaló que "hay una tendencia preocupante, sobretodo en los Estados Unidos, a la autocensura, la que es comprensible por una parte, porque (en los recientes atentados a las Torres Gemelas) han surgido muchas víctimas", agregando que, pese a ello, "los periodistas norteamericanos están actuando con profesionalismo y responsabilidad".

Objetividad e Internet

La relación prensa-poder ya descrita, dio origen, según Cebrián, a una segunda característica esencial del periodismo: la objetividad. "De ahí la importancia de ser transparentes en la entrega de la información, teniendo presente que, de como se aborde la noticia, dependerá la credibilidad del medio frente al público", indicó. Para ilustrar esta realidad, Cebrián resaltó la idea con un dicho español, que recuerda que nada es cierto o falso, sino que todo depende de como se mire.

Pensando ya en la prensa actual, el expositor se detuvo en la idea de que hoy coexisten la televisión, la radio y la prensa escrita con total normalidad, sin que se quiten espacios mediáticos unos a otros, como se temió en algún momento, cuando los empresarios previeron la desaparición del "diario", frente a los otros dos medios, inminentemente más rápidos.

A la realidad anterior, se suma la fuerte entrada de Internet y la prensa electrónica. Este nuevo medio, sumándose a los demás, convierte la información en algo completamente masivo, cayendo incluso en el exceso de ella. "El periodista debe tener presente que más información no es sinónimo de calidad, y que por esta razón debe existir mayor selección y profesionalismo, profundizando las noticias para dar al lector una visión global de las cosas", sentenció el académico.

Para concluir su presentación, hizo alusión a que ese fácil acceso a los medios y la abundancia de personas que practican la labor de informar, hace cada vez más débil la línea de separación entre información y propaganda, por lo que la ética jugará un papel muy importante en el futuro.

Juan Luis Cebrián terminó sentenciando que para mantener un periodismo de calidad, será necesario basar siempre el trabajo en fuentes confiables, además de "no conformarse con lo hecho y estar siempre intentando mejorar el trabajo, sobre la base de profundización e investigación".

Texto completo de la conferencia "Pasado y futuro del periodismo"
(Documento Word 56 k )

Fotos : TVN