Viviana Díaz:
"Pinochet
es demente, no inocente"
La presidenta
de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos
(AFDD) afirma que la renuncia de Augusto Pinochet al Senado no es
un gesto de su parte, sino un acuerdo entre los poderes fácticos
del país.
Según
la información que maneja la agrupación, el procesamiento
del ex senador vitalicio por el Caso Prats sería improbable
en el actual escenario, pues la última resolución
judicial operaría como precedente.
por
Cristian Cabalin Q. y Raúl Rodríguez O.
La
visión de una casona antigua, llena de recuerdos y momentos
dolorosos, se diluye al ingresar a la moderna construcción
de tres pisos, que acoge a la agrupación desde fines de 2001.
Maderas de tonos claros, paredes de color crema, cuadros que recuerdan
la figura de la fallecida ex presidenta de la organización,
Sola Sierra y fotografías que muestran las manifestaciones
en las que exigen verdad y justicia en Chile decoran el lugar, dándole
un aire distinto al que uno pudiera imaginar.
Ser recibidos
por una mujer de temperamento apacible y afable en el trato contrasta
también con la imagen de una mujer luchadora en la batalla
por la defensa de los derechos humanos y la no impunidad en nuestro
país.
Ella es Viviana Díaz, 50 años, soltera y sin hijos.
Ha entregado su vida al esclarecimiento de la desaparición
de su padre, Víctor, ocurrida en 1976, y ha hecho suyo el
anhelo de familiares que nunca más vieron a sus seres queridos,
sucumbiendo, muchos de ellos, al ineluctable llamado de la muerte.
Su Vida y
la Agrupación
CTN: ¿Qué
significa ser hija de un detenido desaparecido?
VD: Un dolor terrible. En los primeros años lo buscaba
vivo, ya no. Fueron días duros, pues sabíamos que
mi padre era sometido a torturas. Estuvo algunos meses incomunicado
en un lugar que se llamaba "La Torre" en Villa Grimaldi.
Solamente le daban un tarro con agua y medio pan. La Dirección
de Inteligencia Nacional (Dina) es la responsable de su desaparición.
Nos quisieron acallar, nos amenazaron. Nos dijeron que "hiciéramos
lo que hiciéramos nunca lo íbamos a encontrar".
Esas palabras me han acompañado todos estos años.
CTN: ¿Cuándo
se incorporó a la directiva de la agrupación?
VD: Durante la década del '70 todo se hacía
colectivamente. Si éramos detenidas, todas confesábamos
ser dirigentes. Así, evitamos que se centraran en algunas
personas. Después de huelgas de hambre y encadenamientos,
en 1984 nombramos la primera directiva pública y su presidenta
fue Sola Sierra. Ella me decía que yo estuviera a la cabeza,
pero me resistí y nunca acepté. Si yo dirijo ahora
la agrupación es por un hecho trágico: la muerte de
Sola en 1999.
CTN: ¿Existe
desgaste en la organización?
VD: El desgaste es producto de los años. No todos
han resistido a una búsqueda tan prolongada. Es un enorme
cansancio físico y mental. Nosotros podríamos establecer
un récord, ya que como organización nos hemos reunido
durante 26 años todos los días martes.
CTN: ¿Cómo
se financia la agrupación?
VD: Con la ayuda de los familiares de los detenidos desaparecidos.
Tenemos una nómina de 300. También elaboramos proyectos,
que son financiados por organizaciones extranjeras.
CTN: ¿Reciben
aportes del Partido Comunista?
VD: No. Sólo contamos con el apoyo económico
de instituciones internacionales, familiares y chilenos exiliados
durante la dictadura. No somos instrumento de ningún partido
político.
La
Renuncia sin Gestos
CTN: ¿Cómo
se perfila la agrupación tras la renuncia de Augusto
Pinochet al Senado?
VD: Seguiremos luchando por los 1.197 detenidos desaparecidos.
Algunos creen que ha terminado un capítulo en la historia
política de Chile. Sin embargo, no es así. Nada está
resuelto. Para nosotros, Pinochet es el principal responsable de
las violaciones a los derechos humanos durante la dictadura, pero
no es el único. Pinochet ha eludido su culpabilidad penal
con la ayuda de los tres poderes del Estado. Su renuncia a un cargo
que se confirió no es un gesto, es un acuerdo entre los poderes
fácticos del país. Es un acto de impunidad.
CTN: Pero,
usted señaló que se despeja el camino sin Pinochet
VD: Sólo porque no estará más en el
Senado. Pues él está acusado de cometer crímenes
contra la humanidad. Delitos que no prescriben, que no pueden ser
amnistiados. Cuando ordenó asesinatos, torturas y desapariciones
estaba en su sano juicio. Ahora fue sobreseído por inhabilitación
mental. Es decir, Pinochet es demente, pero no inocente.
CTN: ¿Qué
le parece la intervención del monseñor Francisco Javier
Errázuriz en la renuncia de Pinochet?
VD: No puedo entender su mediación. Porque la actitud
de la Iglesia Católica que yo conocí es muy distinta
a la actual. Siempre he rescatado la obra y el legado del cardenal
Raúl Silva Henríquez. Ahora la Iglesia se presta para
esta manipulación de Pinochet. Él renuncia al Senado
y utiliza a un alto dignatario de la Iglesia. Pero nosotros seguimos
recordando a los sacerdotes que fueron asesinados durante la dictadura.
CTN: También
participó en la renuncia el presidente del Senado Andrés
Zaldívar
VD: Su cooperación refleja el escaso aporte de los
gobiernos de la Concertación al esclarecimiento de la verdad.
En estos 12 años hay más intentos por poner punto
final al problema, que por resolverlo correctamente. Esto porque
la transición fue pactada con las Fuerzas Armadas. Se les
garantizó que nunca serían enjuiciados. Así,
gobiernan sin presión. Además, la Democracia Cristiana
sigue ligada a los militares como antes del golpe.
CTN: Entonces,
el informe Rettig y la mesa de diálogo, ¿no representan
un avance?
VD: Nosotros queríamos una comisión investigadora
de los crímenes cometidos durante la dictadura. Sin embargo,
el presidente Patricio Aylwin creó la Comisión Nacional
de Verdad y Reconciliación, donde no menciona la justicia.
Fue importante, pues confirmó una realidad negada, sistemáticamente,
por los militares y la derecha. También reivindicó
la memoria de nuestros familiares. No obstante, excluyó otras
violaciones a los derechos humanos del régimen militar: exilios,
relegaciones, torturas.
CTN: Y la
mesa de diálogo
VD: Siempre nos opusimos a su constitución. No ha
resuelto ningún caso. Gracias a nuestro trabajo hemos encontrado
los restos de 182 detenidos. De ellos, 52 fueron hallados durante
la dictadura. Los 130 restantes fueron ubicados en el patio 29 del
Cementerio General. Los militares no entregaron toda la información.
Además, la investigación de los jueces exclusivos
está sometida a un plazo. Nosotros creemos que un proceso
termina cuando se encuentran las víctimas, cuando se hace
justicia y no cuando pasa un tiempo determinado.
CTN: Si los
militares no han entregado todos los antecedentes. ¿Cree
en la cooperación del general Juan Emilio Cheyre?
VD: Ellos conocen el paradero de todos los detenidos desaparecidos.
Pero no creo en un cambio de actitud, pues ellos quieren una nueva
Ley de Amnistía, la que no será posible mientras nosotros
existamos. El mismo general Cheyre está involucrado en la
desaparición de dos menores. Era subteniente del regimiento
Arica de La Serena en esa época. Él declaró
por oficio hace unos meses. Su nombramiento como comandante en jefe
fue un error del Gobierno.
Verdad, Justicia
y Reconciliación
CTN: ¿Cómo
compatibilizar el anhelo de verdad y justicia con el panorama actual?
VD: Es difícil, pero no imposible. Nosotros luchamos
por resolver los casos de nuestros familiares. Cuando Pinochet fue
detenido en Inglaterra, el 16 de octubre de 1998, tuvimos la esperanza
de que fuera castigado por los crímenes que cometió,
pero las gestiones del gobierno de Frei lo impidieron.
CTN: ¿Cree
en la reconciliación nacional?
VD: Nosotros como organización deseamos la reconciliación.
Queremos que Chile vuelva a ser un país de hermanos como
lo fue antes del 11 de septiembre de 1973. Aunque estamos lejos
de la unidad, porque para eso es necesario demostrar que en Chile
no hay impunidad.
CTN: ¿Los
detenidos desaparecidos han dejado de ser un tema importante para
la ciudadanía?
VD: Muchos piensan que ya no es un tema relevante. Pero nosotros
creemos lo contrario. Pues conversamos con la gente, les explicamos
lo que significa nuestra lucha y nos apoyan.
CTN: ¿Hasta
cuándo se preguntarán dónde están?
VD: Hasta cuando nos den una respuesta y encontremos a nuestros
familiares.
En
una frase
Gladys Marín: Esposa de un detenido desaparecido.
Ricardo
Lagos:
Presidente de la República.
Marcelo Moren Brito: Uno de los asesinos de mi padre.
Raúl Silva Henríquez: Un gran hombre.
Sola Sierra: Gran mujer y amiga.
Augusto Pinochet: Un criminal. Asesino. Dictador.
Salvador Allende. Un hombre excepcional.
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Sitios relacionados:
www.memoriaviva.com
www.desaparecidos.org/chile
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