Estudiar medicina en el extranjero:
El peso de una vocación
Dejar a la familia y a los amigos son sólo
las primeras dificultades a las que se enfrentan los jóvenes
que deciden ir a estudiar en el extranjero.
Sin embargo, todo esto no es trascendental a la hora de seguir una
vocación y servir a la sociedad sin intereses económicos
de por medio.
Por
Pascale Fuentes Muñoz y Cristian Contardo Douglas
Luego del desastre que dejó a su paso el
huracán Mitch en 1999, el gobierno cubano encabezado por
Fidel Castro advirtió la carencia de personal médico
que administrara los insumos destinados a revertir el estado de
catástrofe provenientes de varios países, los cuales
enviaban elementos pero no profesionales que los administraran.
El problema estaba claro, la falta de profesionales
de la salud era una constante en todos los países de América,
en especial del centro y del sur, por lo que era de suma importancia
incentivar la proliferación de este tipo de personal de alguna
forma. Es así como el gobierno cubano decidió crear
la Escuela Latinoamericana de Medicina, ELAM, para formar médicos
integrales con una visión internacionalista y que pudieran
prestar ayuda a cualquier región que lo necesitara.
En una antigua base naval estadounidense se emplazaron
las dependencias de la escuela que cuenta en la actualidad con más
de diez mil estudiantes de diferentes continentes, principalmente
de América y África. El régimen de estudio
comienza con un curso de nivelación, parecido a un bachillerato,
para continuar el resto de los siete años con un plan de
estudios que incluye prácticas desde el primer año.
Estudiantes de cuarto año de esta escuela contaron su experiencia
para CTN. Mario Matamala y Francisco Ortiz han tenido que acostumbrarse
al sistema de internado que tiene la escuela, a las altas exigencias
académicas y a la multiculturalidad que se da en el recinto.
A pesar de lo que muchos creen, en la ELAM los
alumnos no reciben educación política, y las clases
sólo de abocan a reforzar el sentido social de su vocación.
Si bien el proyecto estaba pensado para formar diez mil nuevo médicos,
la demanda ha extendido los cursos y la primera generación
de este programa se graduará en agosto del 2005.
Pese a la importancia que recubre, esta iniciativa
no fue tomada en consideración de la misma forma por todos
los países. Es así como la aceptación que ha
tenido en Guatemala, por ejemplo, no ha sido la misma que ha recibido
por parte de nuestro gobierno. De esta forma las becas tiene que
llegar a una entidad no gubernamental o a los partidos políticos.
Matamala postuló a la ELAM a través del Partido Comunista
y se enteró de dichas becas por medio del periódico
El Siglo.
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La historia de Ortiz es diferente: pese a haber
estado matriculado en la carrera de Derecho en la Pontificia Universidad
Católica, no tenía los medios económicos para
estudiar en nuestro país. Así, recorrió todos
los partidos políticos de izquierda buscando una opción
para estudiar. En sólo dos semanas postuló y fue seleccionado
gracias a sus buenas calificaciones en el colegio y a su alto puntaje
en la PAA.
"Los que creen que la gente se va a estudiar al extranjero
porque no les alcanzó el puntaje en Chile, están muy
equivocados. Existe una secretaría académica que supervisa
el sistema de ingreso a la ELAM en cada país y se encarga
de que los postulantes cumplan con las exigencias psicológicas,
económicas y académicas sin priorizar aspectos políticos"
aclaró para CTN.
El gran problema con que se enfrentan los estudiantes
chilenos en Cuba es la desinformación con respecto a la validación
de sus títulos. A pesar de que los libros de medicina de
donde estudian son los mismos en Honduras o en Holanda, los estudiantes
se ven envueltos en engorrosos trámites para poder ejercer
su profesión en este país. Tanto Mario como Francisco
sienten escasa preocupación por parte del gobierno chileno
acerca de su situación. Lo que más les extraña
es que su vocación y el sentido del proyecto cubano apuntan
a que el profesional graduado regrese al país de procedencia
a ejercer la medicina especialmente para ayudar a la gente que más
lo necesita: los más pobres.
Andrés de los Reyes es un chileno que realizó
sus estudios de medicina en Ecuador y Colombia, y aunque la validación
de su título no fue un problema para él, gracias al
acuerdo Andrés Bello ratificado entre estos países,
ha tenido una serie de dificultades para conseguir trabajo desde
que volvió al país a fines de los años 70.
"He sentido una fuerte discriminación, especialmente
por parte de los contratantes del sector privado que no aceptan
médicos titulados en el extranjero", dijo.
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En el caso del sector público los médicos
extranjeros son bienvenidos ya que los chilenos se preocupan especialmente
de trabajar en sus consultas particulares dejando de lado su rol
social. "La función del médico en los países
donde estuve se enfoca en una ayuda real a los más necesitados
con políticas de salud pública preocupadas de la prevención
y del seguimiento de los casos, mientras que en Chile la atención
médica dependerá si los pacientes vienen de Plaza
Italia para abajo o Plaza Italia para arriba" declaró
De los Reyes para CTN Andrés de los Reyes.
"Junto con la segmentación socio-económica,
las políticas de salud pública en Chile no son buenas
y en este sentido, creemos que el gobierno debiera dar facilidades
a los profesionales que no buscan lucrar con su trabajo", agregaron
Francisco y Mario. Por esto ven como un prejuicio que no acepten
de buenas a primeras una iniciativa tan valiosa y digna de imitar
como lo es la ELAM.
Según fuentes ligadas a la Universidad
de Chile, el examen para la validación del título
tendría que ser igual para cualquier persona que haya realizado
sus estudios en el extranjero sin tomar en consideración
aspectos políticos de ningún tipo. Sin embargo los
médicos que estudian fuera de Chile coinciden en que se les
hará mucho más difícil el camino en su propio
país, ya sea por la discriminación por parte de sus
pares, de sus pacientes y en especial de las políticas de
salud chilenas, que todavía están lejos de ser iguales
para toda la sociedad.
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