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Administración
de servicios Será un ingeniero, dice el abuelo, un gran arquitecto sería perfecto ...pero ¿si es niñita?. Lo ideal sería que pudiera desarrollar todas sus capacidades, sus exclusivas capacidades. Por siglos, servir ha sido la tarea otorgada a la mujer. Pero el paso de los años no ha sido en vano ya que la evolución del servicio no se ha limitado al desarrollo de electrodomésticos. Por Pascale Fuentes Muñoz y EStefanía Etcheverría Toirkens
Prestigioso empresario del sector busca señorita culta, servicial y con valores católicos. Que sepa decoración, economía y dietética. Experta en lavandería, álgebra y cocina. Más allá de lo extraño que pueda sonar este aviso, sorprende que exista una carrera universitaria que enseñe tal heterogeneidad de cualidades. Toda la diversidad de materias se agrupa bajo el nombre de Administración de Servicios. La Universidad de los Andes es la única institución chilena que imparte esta carrera, la cual es guiada por el principio de que para saber mandar, primero hay que saber hacer. Por esto, las estudiantes aprenden desde cálculo hasta cómo pelar papas. A pesar de las diferencias entre los ramos, todos ellos intentan contribuir a que las egresadas puedan entregar un servicio rápido, profesional y amable. Como dijo a CTN María Isabel Jottar, secretaria académica de la carrera, “el ser humano es el único ente de la naturaleza capaz de servir, inculcamos que ser persona es el único requisito para recibir un buen servicio”. Si su espíritu se siente atraído a cumplir la misión de asistir a los otros, y cree tener las condiciones para ser un profesional del servicio, tenga en cuenta que no se admite la testosterona. Según Jottar la decisión de excluir a los hombres se basa en potenciar las cualidades propias de la mujer: su capacidad y sensibilidad de servicio, de hacerse cargo de lo concreto y de fijarse en los detalles. “¿Qué quieres ser cuando grande? Quiero ser mujer”. La incredulidad y sorpresa que provoca este club de Lulú, transforma a la carrera en materia prima de chistes. Francisca Téllez estudiante de tercer año de Administración de Servicios no toma en cuentas estos comentarios. “La gente cree que la carrera consiste en hacer camas, pintar figuritas, cocinar y no saben que no nos dedicamos sólo a eso, también tenemos finanzas, costos”, expresó a CTN.
Opus Dei y su doctrina del servicio Desde sus inicios, las mujeres se han encargado del control de todos los servicios sociales en la Obra de Dios. Para Jesús Ynfante, periodista español y autor del libro “Opus Dei: así en la tierra como en el cielo”, Escrivá condenó a la mujer a ser una especie de criada esposada dentro de la prelatura. Sin embargo, esta especie de condena no se refería a una tarea menor. Es así como una de las obras apostólicas del Opus Dei es revalorizar la labor de servicio. De esta manera, una forma de cumplir la misión es creando carreras que profesionalicen el servicio. En este contexto se explica el origen de la administración de servicios. La periodista chilena María Olivia Mönckeberg señala en su libro “El Imperio del Opus Dei en Chile” que la creación de carreras que tengan relación con la hotelería y la gastronomía ha sido un afán en la obra. Ya que en cierto modo este ámbito es un campo en el que las mujeres del Opus Dei se han especializado por la relación que tienen con la administración de sus casas. Dentro del Opus Dei lo doméstico se considera el espacio de desarrollo femenino, lo que se entiende al conocer las ideas de su fundador. Escrivá de Balaguer encasilla a la mujer en su rol clásico, recalcando que le es propio llevar a la familia por sus características naturales como la ternura y su amor por lo concreto. ¿Serán estas cualidades exclusivas de las mujeres?
Ellos también pueden Si la mujer no es más apta naturalmente ¿por qué su presencia laboral es mayor que la masculina en el sector servicios? Sería una cuestión de estereotipos. Según Lavanderos la idea de que las mujeres sólo están capacitadas para dedicarse a esta labor es un pensamiento propio de la cultura latinoamericana machista que relaciona la maternidad al trato con personas. Administración de Servicios, es para Lavanderos similar a lo vivido en los años cincuenta, cuando la reelaboración de la división del trabajo exigió que las mujeres se transformaran en profesionales de lo doméstico. Por esto la carrera también estaría formando mujeres capaces de administrar grandes casas con muchos recursos y varios empleados. Si esta realidad se proyectara en ocho milímetros,
la casa-empresa sería el único escenario donde la
mujer tendría un papel protagónico. Interpretando
de manera magistral el que se considera su rol por excelencia: súper
mamá, súper esposa, súper dueña de casa,
es decir toda una súper mujer. |
